La hemofilia adquirida es una enfermedad autoinmune causada por autoanticuerpos dirigidos contra epítopos funcionales del factor VIII de coagulación (FVIII), los pacientes con esta enfermedad presentan episodios de hemorragia espontánea o inducida por procedimientos invasivos o trauma sin contar con antecedentes familiares o personales de hemorragia. El objetivo de este estudio fue generar una base de datos pan-Europea prospectiva de gran escala sobre la demografía, diagnóstico, enfermedades subyacentes, características del sangrado, tratamiento y desenlaces de pacientes con Hemofilia adquirida.

EACH2 fue diseñado como un registro europeo, prospectivo, multicéntrico, con el objetivo de recopilar datos sobre los pacientes con hemofilia adquirida de acuerdo a criterios predefinidos. Se reportaron al registro, casos de 13 países europeos y 117 centros de tratamiento distintos. La aprobación del comité de ética local se obtuvo antes de que los pacientes fuesen incluidos.

 

 En cinco países (Finlandia, Grecia, Hungría, Italia y Portugal), que incluían 43 centros, las autoridades locales permitieron únicamente el reclutamiento de pacientes supervivientes y no permitieron el ingreso de datos de personas fallecidas. Esto puede haber afectado el análisis de desenlaces y supervivencia, y en menor medida, el análisis demográfico.

 

Los pacientes podrían ser incluidos si contaban con diagnóstico de hemofilia adquirida entre el 1 de enero de 2003 y el 31 de diciembre de 2008.

• Actividad plasmática de FVIII <50 U dL-1

• Detección de un inhibidor del FVIII

• Consentimiento informado firmado

• Se permitió reportar pacientes de cualquier edad

• Hemofilia A congénita

• Inhibidores de la coagulación distintos a los anticuerpos anti-FVIII

• La demografía

• Enfermedades subyacentes

• Características de los episodios hemorrágicos

• Terapia hemostática e inmunosupresora

• Los eventos adversos

• Los desenlaces en el seguimiento final

 Los episodios de hemorragia severa se definieron como un nivel de hemoglobina por debajo de 8 g/dL-1 o una caída de más de 2 g/dL-1, o hemorragia que representara una amenaza para la vida o para las extremidades, el sistema nervioso central, el músculo profundo, y finalmente sangrado retroperitoneal.

• Entre 2003 y 2008 se incluyeron 501 pacientes (266 varones, 235 mujeres) de 117 centros y 13 países europeos.

• En 467 casos, las pruebas de hemostasia y para el diagnóstico de hemofilia adquirida se llevaron a cabo luego de un evento hemorrágico.

• En el momento del diagnóstico, los pacientes contaban con una edad mediana de 73,9 años.

• La Hemofilia Adquirida fue idiopática en el 51.9% 

• Se presentó asociación con malignidad o enfermedades autoinmunes en el 11.8% y el 11.6% de los casos. 

• 57% de los casos no relacionados con estado de embarazo eran hombres.

• Cuatrocientos setenta y cuatro episodios hemorrágicos se informaron en el momento de su presentación.

• La terapia hemostática se inició en el 70.5% de los pacientes.

• El diagnóstico tardío afectó significativamente el inicio del tratamiento en el 33.5% de los casos.

• 477 pacientes se sometieron a inmunosupresión.

• El 72.6% alcanzó la remisión completa.

El registro EACH2 representa actualmente la mayor recopilación de pacientes con Hemofilia Adquirida y se destinó a complementar de forma prospectiva y a gran escala la información local de los pacientes. EACH2 reclutó aproximadamente el 12% del número estimado de pacientes con Hemofilia adquirida en los países participantes. 

 

El diseño prospectivo, la inscripción de pacientes consecutivos, el tamaño de la muestra y el período de observación a largo plazo (hasta 6 años) generaron el conjunto de datos más grande actualmente disponible para caracterizar la mayoría de los aspectos de esta enfermedad hematológica infrecuente. 
Uno de los hallazgos novedosos que presenta el estudio es la preponderancia de los hombres que se presentan con Hemofilia Adquirida, la cual es especialmente marcada si se excluye la Hemofilia Adquirida relacionada con el embarazo. Este novedoso hallazgo contrasta con las observaciones reportadas por las cohortes anteriores, en las que la preponderancia fue mayor en mujeres. 

 

Los resultados sugieren que una proporción de los pacientes con Hemofilia Adquirida siguen sin diagnosticar por una cantidad de tiempo preocupante. Aunque el análisis de los pacientes con retraso en el diagnóstico no demostró diferencias en la respuesta al tratamiento, la intensidad de la terapia o el desenlace; actualmente se acepta que los pacientes se encuentran en riesgo de hemorragia fatal hasta que los inhibidores hayan sido erradicados.

 

La distribución de las enfermedades subyacentes, que se asocian posiblemente con el desarrollo de anticuerpos anti- FVIII es consistente con la reportada en informes anteriores, en los que la mitad de los casos son de origen idiopático. La malignidad y las enfermedades autoinmunes representan aproximadamente el 12% de los pacientes. Es posible que la evolución de la Hemofilia autoinmune en pacientes que ya reciben agentes inmunosupresores sea distinta a la observada en otros grupos. 

 

El cáncer se confirmó en el 11,8% de los pacientes y se encontró en progresión en el 6% de los casos tratados. La proporción de enfermedad asociada al embarazo fue mayor que la reportada en el estudio de vigilancia prospectiva del Reino Unido y puede reflejar la remisión de este subgrupo de pacientes a centros especializados.